Bueno esta zorra mexicana suplica que no se la metan por el culo y es que le duele mucho. Pero este cabrón no le hace caso y la pone a cuatro patas. Así que le separa las nalgas y primero le mete los dedos uno por uno hasta llegar a tres. Le deja un buen agujero y le mete la verga sin piedad, se la coge una y otra vez hasta que finalmente la hace tener un rico orgasmo bien perron.