Me toco coger con una madura bien pinche gritona, hasta me daba pena en el hotel con los demás huéspedes, pues con tantito que le metía la verga ella ya comenzaba a gritar de placer. Se trepo encima de mi para que se la metiera hasta el fondo de su panocha, así que comenzó a mover el cuerpo como una diosa hasta que los dos explotamos con un espectacular orgasmo.